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SALUDO

EDUCACIÓN INICIAL

LA EDUCACIÓN EN LOS PRIMEROS AÑOS

La educación en los primeros años de vida es fundamental para el desarrollo integral del infante, puesto que en esta etapa el niño y la niña tiene mayor plasticidad cerebral, mayores conexiones neuronales y por ende un mejor aprendizaje.

La educación de los niños y niñas es tarea de todos; esta no se restringe a 4 paredes de una institución educativa. Cada uno responde a las diversas  necesidades e intereses infantiles a la vez que enriquecen su experiencia cotidiana de vida 

La infancia es una etapa del niño caracterizada por la curiosidad, por la actividad, por el movimiento, por el juego. Cuando se es niño\a se siente  fascinación por cada cosa nueva que se descubre, les encanta explorar el mundo, investigar el porqué de las cosas. No se quedan quietos, se mueven de un lado a otro.  Este movimiento y este contacto con la naturaleza  permiten  aprender nuevos conocimientos,  colores, formas, texturas, tamaños, etc.

Por medio del juego se relacionan con otros niños\as, aprenden a compartir,  a respetar turnos, a ser más tolerantes, a llevar una conversación, a escuchar al otro. Los niños imitan las conductas que ven a su alrededor.

DESARROLLO EVOLUTIVO DEL NIÑO DE 18 A 24 MESES


§     Desarrollo psicomotriz

La posibilidad de caminar le abre al niño un enorme abanico de posibilidades, ya que le permite explorar el entorno de un modo mucho más amplio. Debemos facilitarle y animarle su espíritu aventurero, pero siempre bajo la vigilancia de un adulto, ya que el niño no es consciente de los peligros que le rodean. Al final de esta etapa es capaz de correr, saltar, dar patadas a una pelota, bajar escaleras solo.

En cuanto a la motricidad fina, el niño  pasa de movimientos no controlados  a la hora de manipular objetos (lanzar una pelota, manejar una pintura) a movimientos  precisos. Al final del segundo año el niño es capaz de enhebrar una cuerda en un agujero grande, o introducir monedas en la ranura, realizar trazos circulares, e incluso manejar la cuchara.

§     Desarrollo cognitivo

Al inicio actúa impulsivamente ya que no comprende las consecuencias o efectos de su comportamiento, pero poco a poco las acciones del niño comienzan a caracterizarse por tener una intención. El niño no actúa porque sí, limitándose a responder a los estímulos, sino que comienza a comprender las consecuencias que tienen las acciones, mediante la experimentación y el descubrimiento por ensayo-error.

Comienza también a desarrollarse la comprensión de la permanencia de los objetos, esto es, comprende que aunque un objeto desaparezca (porque lo escondamos por ejemplo) sigue existiendo, y es un buen momento pues para realizar juegos de aparecer-desaparecer.

En torno a los 18 meses, empieza a realizar pequeñas asociaciones y emparejamientos y entender algunos conceptos (grande-pequeño, colores…).

§     Desarrollo del lenguaje

La adquisición del lenguaje comienza primero por la comprensión de palabras (juguetes, objetos cotidianos de frecuente uso, algunos animales o partes del cuerpo…) o órdenes (del tipo: dame o toma), a la que posteriormente se unen las primeras emisiones del niño.

En cuanto a la comprensión comienza entendiendo órdenes y respondiendo a ante estas. Reconoce objetos al nombrarlos y los señala. Cuando le enseñamos objetos debemos acompañar su nombramiento señalando el objeto y posteriormente limitarnos a nombrar el objeto sin indicarlo gestualmente, para comprobar que el niño comprende y asocia realmente la palabra al  objeto.

En cuanto a la emisión de palabras, el niño comienza apoyando sus verbalizaciones con gestos (por ejemplo, señala el biberón y pide agua). Es  frecuente el uso de onomatopeyas para nombrar algunos objetos o animales. Debemos respetar esta etapa por la que pasa el niño, pero corregirle repitiendo el nombre del objeto o animal correctamente para que vaya interiorizando el nombre real.

§     Desarrollo personal-social:

A lo largo de esta etapa el niño adquiere una serie de habilidades que permiten iniciarse en el desarrollo de su autonomía.

En la alimentación, hacia los 18-20 meses podemos iniciar al niño en el manejo de la cuchara. Hacia el 15º mes de vida, el niño puede participar de su cuidado e higiene lavándose las manos.

En cuanto a la socialización, el niño comienza a tomar conciencia y distinguir entre él mismo y la gente que le rodea. Su juego empieza siendo de un modo solitario.

El niño tiende a imitar todo lo que le rodea, y repetir las gracias que observa en los que le rodean, principalmente si se trata de adultos.